Caminaba por la calle de la vida, y mientras así lo hacía le salían espumas por la mirada, y por los pies, espumas de mar, de salitre, de sudor de penas, se le salía la vida en burbujas de sal.
Y mientras mas caminaba, mas se le hinchaban las piernas y se le engomaban los pies, llenas de espumas de sal, de sangre y cal.
Caminaba.
4 comentarios:
ME GUSTO LO QUE ESCRIBIS.Caminar por la vida...a veces es bueno otras no...pero se sigue caminando...como sea
Precioso. Es la vida y mejor seguir caminando. Un saludo
Gracias por tu visita
seguiremos en el camino de la vida para seguir leyéndonos,bonito poema
Besos
Pero nunca dejar de caminar, no importa si le salen escamas a los pies, siempre adelante. Bellas letras. Besos, cuidate.
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